23/6/08

Com va anar la Setmana de El Salvador?

Doncs molt bé.

La Setmana va començar el dia 2, amb la xerrada de la "Guerra de El Salvador i les seves conseqüències", una xerrada molt interessant on el Martí que ens va il·lustrar sobre la història de El Salvador i com es va donar peu a generar-se una guerra civil a El Salvador.


El debat de després va ser molt amé gràcies a la presència d'un integrant del partit ARENA, l'alcalde de La Palma. La seva presencia i la de diversos salvadorencs va fer que el debat fos molt ric amb visions i punts de vista.



un moment de la festa

El dia 6 es va fer la xerrada "El Salvador, tu i jo" on els membres del comitè van explicar la seva experiència i amb un gran èxit de públic, la sala es va omplir. Dues hores de xerrada que van ser poques per a explicar una experiència tant intensa en un país tant petit.

I tot seguit, la Festa de Casamiento, on varem poder escoltar tot un ventall de música salvadorenca, des de Ska fins a Cumbia, des de Latin Rock fins a Reageton.

Tot un éxit que de ven segur repetirem.

Aqui teniu totes les fotos

16/6/08

Reportatge sobre El Salvador a Radio Sabadell

Aqui teniu el link a un reportatge de Radio Sabadell sobre El Salvador i en el que hi intervé l'Anna Fermoso, membre del comitè.

4/6/08

Any final del Govern d'Antonio Saca

Mirtala Lòpez, Responsable de Europa del FMLN ens ha fet arribar aquest correu als membres del Comitè:

Subject: Comisión Política EN EL AÑO FINAL DEL GOBIERNO DE ANTONIO SACA
Date: Sun, 1 Jun 2008 11:39:09 -0600

EN EL AÑO FINAL DEL GOBIERNO DE ANTONIO SACA

Finaliza el cuarto año de gobierno del Presidente Antonio Saca González. Es el cuarto mandato de ARENA, que culmina en medio de una aguda y nunca vista crisis económica, social, ambiental, de seguridad y de deterioro de la institucionalidad en nuestro querido país. La crisis causa enormes deterioros en la forma de vida de las familias, especialmente de las que viven en pobreza y de las capas medias, que ven venirse abajo un estatus construido en base a esfuerzos y sacrificio.

Los efectos de las políticas impulsadas desde los gobiernos areneros son catastróficos. En los sectores de población más desprotegidos los ingresos se vuelven dramáticamente insuficientes. El hambre aprieta y, ante la desprotección del Estado, las familias salvadoreñas disminuyen su consumo alimenticio y la atención de sus enfermedades, reducen su movilización y su recreación. Pero, afortunadamente, se está abriendo paso la esperanza en un cambio seguro, que nos devuelva el aliento, el sentido de Patria, la vida digna que los 19 años de gobiernos areneros han alejado.
Ante la crisis económica agravada, el FMLN lucha en los diferentes espacios junto al pueblo: en las alcaldías, en la Asamblea Legislativa, en el seno de las comunidades, en la movilización popular en pro de la justicia social. Vivimos y sentimos con el pueblo, esforzados en dar vida a ese cambio anhelado por generaciones de salvadoreños y salvadoreñas.
El FMLN cree que es necesario tomar conciencia a fondo del origen, gravedad y naturaleza de la crisis que vive el país, que se expresa en carestía,
Desempleo, criminalidad, impunidad, deterioro del patrimonio natural y el descrédito e inoperancia de la institucionalidad establecida en la Constitución de la República y los Acuerdos de Paz. Para este efecto mantenemos abierto el diálogo social, para construir desde allí una visión programática que aporte respuestas estructurales a la crisis nacional y abra las puertas al desarrollo social y económico.

Mientras tanto, también creemos que es necesario responder con hechos concretos ante la coyuntura dramática que golpea a las familias. Por ello, expresamos una vez más nuestra voluntad de buscar amplios entendimientos, que den paso a respuestas inmediatas a la problemática nacional; y en ese sentido hemos adelantado propuestas precisas:
1. Asegurar alimentos a la población más pobre mediante el establecimiento de comedores populares en los municipios, empleando fondos estatales de manera dirigida a niños y adultos a través de las alcaldías.
2. Potenciar la producción de alimentos contribuyendo desde los municipios con potencialidades agropecuarias, a fin de garantizar la seguridad alimentaria inmediata y producir ingresos a la familia rural.
3. Abaratar el costo de los combustibles, en el marco de convenios de cooperación energética con países amigos, asegurando un suministro continuo para las necesidades de la economía nacional.
4. Introducir medidas reales e inmediatas de austeridad en el gasto público, eliminando el despilfarro gubernamental y la propaganda abusiva.

COMISIÓN POLÍTICA
Junio 1º de 2008

19 anys d'Arena, 4 anys de Saca

Mirtala Lòpez, Responsable de Europa del FMLN ens ha fet arribar aquest correu als membres del Comitè:


Subject: balance legislativo 4 años de saca
Date: Sat, 31 May 2008 19:10:31 -0600

19 AÑOS DE ARENA, 4 AÑOS DE SACA: TERMINA LA LARGA NOCHE ARENERA, SE ACERCA LA HORA DEL CAMBIO.

Se cumplen 4 años el gobierno de Antonio Saca y 19 años de gobiernos areneros. Han sido años de fracasos, demagogia, abusos y corrupción gubernamental. Como resultado, este aniversario encuentra al país en una profunda crisis política, económica, social, ambiental, y de seguridad pública, con tremendas implicaciones para la vida de las familias salvadoreñas.
Tras años de privatizaciones, desmantelamiento de la protección a la industria y agricultura nacionales, dolarización, reducción el papel del Estado en áreas críticas para el desarrollo social y productivo, y la entrega de actividades económicas clave a intereses monopólicos, el pueblo vive una situación desesperante. La gente, sobretodo la más humilde, tiene que soportar un elevadísimo costo de la vida, que vuelve cada día más inalcanzables los alimentos, las medicinas, los combustibles y los servicios básicos para la vida personal y familiar. Con el gobierno de Antonio Saca los salvadoreños y salvadoreñas tienen el maíz, el fríjol y el resto de productos de la canasta familiar más caros de la historia de El Salvador. Ante ello, la respuesta oficial es la indiferencia y, peor aún, el ofensivo despilfarro de los dineros públicos en una inmoral campaña de propaganda.
En la presente crisis el señor Saca no puede evadir su responsabilidad ni la de sus predecesores. El abandono de la producción agropecuaria en beneficio de la actividad comercial importadora generó un déficit en la producción de alimentos, tras la quiebra de muchos productores. En la actualidad, el país cuenta con más de 450 mil manzanas de tierra sin cultivar, campesinos que saben producir y nuestras propias semillas. Pero la agricultura no tiene acceso al crédito, no existe asistencia técnica apropiada ni apoyo a la comercialización. Los agricultores y ganaderos sufren del oligopolio que importa y comercializa todos los insumos.
El país vive una crisis ambiental, con la sobrevivencia de apenas un 2% del bosque natural, un 90% de las aguas superficiales contaminadas, el consumo creciente de combustible fósil y la amenaza latente de la minería metálica.
En 19 años no se produjo un crecimiento económico capaz de generar empleos y reducir la pobreza. Al contrario, el modelo de libre mercado sin ningún tipo de regulación dio lugar, en la práctica, a gravísimas distorsiones en la economía, como monopolios y oligopolios. El ejemplo del mercado de combustibles es la mejor evidencia de ello, pues estimula la concentración en pocas manos y encarece indebidamente los precios. En El Salvador, hoy la mayoría de empresarios deben trabajar en un mercado donde no hay una leal y libre competencia; mientras se observan fuertes niveles de contrabando y evasión de impuestos.
El modelo económico profundizó la pobreza y la precariedad en las condiciones de vida de la gente, obligando a millones de salvadoreños y salvadoreñas a emigrar en busca de reales oportunidades. El régimen no puede presentar como logro la expulsión cotidiana de cientos de compatriotas, ni mucho menos vanagloriarse del envío de remesas familiares. Hoy en día, los pobres que ayer emigraron sostienen a sus familias, al margen de las políticas sociales del gobierno.
A pesar de haber dispuesto los gobiernos areneros de cuantiosos recursos presupuestarios, muchos de ellos gracias al endeudamiento improductivo, El Salvador presenta bajísimos niveles de inversión en las necesidades de su gente. Para el año 2004 la inversión social en términos presupuestarios representó el 7.4% del PIB. En el 2008 los recursos presupuestados para tal inversión equivalen a un 6.6% del PIB, lo que expresa una caída del 0.8%.
Como resultado tenemos, como ejemplo, un sistema de salud pública en estado lamentable. Se ha profundizado la crisis del desabastecimiento de medicamentos, insumos médicos, equipo y mobiliario en toda la red de centros de salud, donde además continúan los cobros ilegales. El Gobierno Saca y su antecesor han evidenciado incapacidad para ejecutar proyectos que mejoren la infraestructura hospitalaria, mientras promueven estrategias encaminadas a la privatización de la salud.

Medidas improvisadas para enfrentar la caída de credibilidad del Gobierno, como la llamada "Alianza por la Familia", solo denotan la demagogia de los actuales gobernantes. Varias de éstas medidas ya están contempladas en las leyes y otras, como la gratuidad de la educación pública y la prestación del 100% del salario por maternidad a las trabajadoras, están incluidas en diversos proyectos de presentados por el FMLN a la Asamblea Legislativa, y que el partido oficial se resiste a aprobar.
Un fracaso evidente del Gobierno es su política de seguridad ciudadana. Vivimos en un país inseguro y violento. Durante el año 2007, el promedio de homicidios diarios fue de 9.7 (fuente: PNC). De ser ciertos los datos del Censo de Población 2007, El Salvador exhibe la tasa de homicidios más alta del continente y posiblemente del mundo. Este dudoso lugar expresa el fracaso de Saca y su candidato Rodrigo Ávila en materia de seguridad pública. Paradójicamente, la inseguridad para la gente se convirtió en los últimos años en un lucrativo negocio para altos dirigentes areneros.
En los últimos años se consolidó un estilo de gobernar autoritario, excluyente y represivo. Saca abandonó todo esfuerzo de concertación política y se dedicó a subvertir el orden constitucional. La institucionalidad del país está hoy secuestrada por la derecha. El resultado está a la vista: la PNC, cuya naturaleza civil y apolítica ha sido adulterada, muestra poca efectividad en el combate al crimen. La Fiscalía General y el sistema de justicia no gozan de confianza, mucho menos de independencia frente al poder económico y político. La corrupción gubernamental se encubre gracias al control de la derecha sobre la Corte de Cuentas. El Tribunal Supremo Electoral no tiene credibilidad ante la ciudadanía. La derecha rechazó una reforma electoral consensuada y se ha dedicado a imponer cambios al Código Electoral en un claro sentido antidemocrático y que abren las puertas a prácticas fraudulentas.

Mientras tanto, Saca y su bancada legislativa se niegan a aprobar un conjunto de leyes que democratizarían y transparentarían el sistema electoral, como el control del financiamiento de los partidos políticos, la regulación de la propaganda electoral, el establecimiento del voto residencial y el voto en el exterior.
El país experimenta, asimismo, un retroceso en materia de derechos humanos. La PNC ha vuelto a ser el instrumento para acallar la protesta popular, como se evidenció en los ataques a manifestantes en Suchitoto que legítimamente defendían su derecho al agua. Allí se aplicó arbitrariamente a las y los detenidos, por la Fiscalía y los Jueces Especializados, la inconstitucional Ley Especial Contra Actos de Terrorismo; en un claro mensaje del gobierno de represión y penalización de la protesta social.
CONCLUSIÓN:
Ante la crisis nacional, el pueblo salvadoreño ha tomado la firme decisión de cambiar el rumbo del país, otorgándole su confianza al FMLN, a sus Diputados y Diputadas, a sus Alcaldes y Alcaldesas y a su Fórmula Presidencial. Los más reciente estudios de opinión pública evidencian el reclamo popular por un verdadero cambio en la conducción del país y un rechazo mayoritario al continuismo de la derecha en el gobierno.

Nuevos vientos soplan para el futuro de El Salvador: un futuro de esperanza y prosperidad, de retorno al orden establecido en la Constitución de la República. Por fin el pueblo tendrá un gobierno a su servicio, no al servicio de intereses y privilegios de una reducida minoría. Por fin habrá democracia en El Salvador y se empezará a respetar la Ley y el rol de las instituciones fundamentales de un Estado de Derecho. Por fin iniciaremos el camino de superar la pobreza, las extremas desigualdades y la exclusión social en que se debate la inmensa mayoría de compatriotas. El cambio viene y no hay fuerza capaz de detener esos anhelos de la sociedad.

GRUPO PARLAMENTARIO DEL FMLN.

San Salvador, Junio 2008.